Junio 2011. De la roca al metal y del pasado al presente.
A través de un taller de ar201queología metalúrgica, los asistentes a las XV Jornadas de Puertas Abiertas organizadas por el Museo Arqueológico José M. Soler han podido conocer los orígenes de la fundición del cobre, participando en una experiencia única que recrea fielmente la Prehistoria.
A través de un taller de ar201queología metalúrgica, los asistentes a las XV Jornadas de Puertas Abiertas organizadas por el Museo Arqueológico José M. Soler han podido conocer los orígenes de la fundición del cobre, participando en una experiencia única que recrea fielmente la Prehistoria.
El patio trasero de la Casa de la Cultura se ha convertido en un multitudinario poblado de la Edad del Bronce en el que un grupo de expertos arqueólogos, utilizando aquellos genuinos y rudimentarios instrumentos, han explicado el proceso por el que el mineral era transformado en objetos metálicos como hachas, buriles y puntas de flecha. Esta actividad experimental forma parte de un programa de investigación y divulgación científica de la Universidad de Granada denominado “De la roca al metal”, que pretende acercar la tecnología primitiva de un modo muy didáctico, fácil y comprensible para todos los públicos.
Preparando las cañas para el soplado.
Una de las cosas más llamativas es que cualquiera de los presentes ha podido participar de una manera activa en las distintas fases del proceso metalúrgico: bien soplando las brasas depositadas en un cuenco cerámico para calentar el mineral y extraer el metal, o bien fundiendo el cobre obtenido tras la reducción para moldearlo y conseguir armas o herramientas metálicas. El alcalde, Francisco Javier Esquembre, y los concejales de Cultura y Medio Ambiente, Isabel Micó y José Molina, han querido dar ejemplo y probar los tubos de soplado de madera para lograr encender los rescoldos, lo que requería, sin duda, una considerable capacidad pulmonar y un gran esfuerzo.
Para alcanzar una alta temperatura se necesita mucho aire.
La directora del Museo Arqueológico Municipal, Laura Hernández, destacaba que “todo este proceso se puede documentar con piezas originales extraídas de los yacimientos de Cabezo Redondo y de Terlinques”, exhibidos en una vitrina preparada para recibir a los visitantes del museo durante las jornadas. Esta vez 219 personas tomaron parte en el taller y 142 visitantes acudieron a las instalaciones museísticas.
Las pepitas de cobre se muelen.
Finalmente, se han tenido que suspender las visitas previstas a Cabezo Redondo por razones técnico-administrativas relacionadas con las obras de consolidación del yacimiento llevadas a cabo durante el último año. En cuanto sea posible, se prevé abrir de nuevo este espacio para que todos los amantes del patrimonio arqueológico villenense puedan descubrir los últimos hallazgos y comprobar el resultado de las obras financiadas por el Ministerio de Fomento y la Conselleria de Cultura.
El fundido de cobre con la obtención final de la pieza en el molde.
El resultado de la reducción.
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