Historieta por... Hermógenes Esquembre
El hijo del tio Sidoro pensó en vestirse de Moro.
Y arrecogió los pendones que encontró por los rincones.
Y arrecogió los pendones que encontró por los rincones.
Se puso un par de saquicos, por pantalón, muy bonicos.
Y una toballa por faja que resultaba muy maja.
Y una toballa por faja que resultaba muy maja.
Grandecico era el chaleco porque él estaba muy seco.Con la rodeta y la escoba un moro clavao (sin coba).
Se mete mano al bolsillo y se tropieza un pitillo.Lo enciende y allá va el sorche a lucirse por el porche.
Se lleva al padre pateta que fume un mozo de teta.Y le suelta un soplamocos de los que se ven muy pocos.
- ¡Qué finura tio Sidoro pa pedirle lumbre a un moro!
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