Me resulta muy difícil epilogar la vida de quien hoy nos abandona, pero si decimos que fue joyero de profesión y parte importante del descubrimiento del tesoro de Villena, seguro que todos sabemos a quien nos referimos.
Pues bien amigo hoy con la mejor de sus sonrisas y con la seriedad que lo caracterizaba, nos ha dejado un amigo ejemplar, un esposo modelo y un padre que a la vez fue amigo.
Hoy ha dejado este mundo Carlos Miguel Esquembre Alonso, ya no sonreirá como siempre lo hacía, ni su cálida y profunda voz sonará en nuestros oídos. A partir de hoy solamente quedará el recuerdo de su amistad a unos y la de admiración a otros.
Su adiós podemos definirlo como sereno y esperado y nos queda la certeza de que su sonrisa quedará grabada para siempre en nuestro corazón.
Descanse en paz Carlos Miguel Esquembre Alonso, gran profesional, eterno creyente, buen padre, ejemplar hijo y modelo de esposo que hoy nos abandona en silencio.
Ernesto Pardo Pastor
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