1993 EL CINE COMO FENÓMENO CULTURAL Y COMERCIAL

El cine como fenómeno cultural y comercial. 

Por ANTONIO V. MARTÍNEZ

Como es habitual año tras año, nos asomamos a las páginas de la revista Villena para hablar del fenómeno cinematográfico en nuestra ciudad. A lo largo del tiempo, hemos ido abordando aspectos fundamentales como el ver cine en una sala oscura, recuerda «El cine es mejor en el cine», de la feroz competencia de las televisiones y del vídeo, del poco respeto como fenómeno cultural que ha tenido por parte de empresarios que no han visto en él más que un negocio como cualquier otro, y de las proyecciones alternativas que se han sucedido, bien sea a través del Cine-Club VILLENA, o simplemente de la Casa de la Cultura. Nos hemos disgustado por no tener una programación regular de cine, y luego nos hemos felicitado al conseguirla. Hemos celebrado año tras año, la realización de la tradicional Semana de Cine de Villena, y ahora, cuando parece que todas nuestras reivindicaciones se han cumplido, parece como si ya no hubiera lugar a nuevas quejas. Pero ojo, no todo es brillo y esplendor en el marco del cine a nivel local.

Pero vayamos por partes, analicemos el por qué todavía existen lagunas importantes a la hora de poder ver todo el cine que se estrena en otras ciudades.

En Villena existe en la actualidad una única sala comercial, que cambia su programa con carácter semanal, con lo cual, tan sólo puede estrenar aproximadamente la tercera parte del material que se ve en España. Por razones obvias, la mayor parte de las películas estrenadas son puro entretenimiento y, a veces, no tienen ningún valor añadido. No es que resulte rechazable este tipo de cine, pues no olvidemos que no sólo es cultura, también una industria y de las importantes, y todos alguna vez, buscamos simplemente un rato de evasión que nos aparte por un momento de los problemas cotidianos. Lo que también es cierto, es que existen muchos films que culturalmente tienen mucho que decir y que dada su poca rentabilidad, a veces no tienen cabida en las sesiones comerciales de la empresa privada. Este problema se resuelve gracias a la Casa de la Cultura y asociaciones culturales que programan cine a lo largo del año. Sin embargo, los problemas de contratación con las casas distribuidoras, generalmente multinacionales, hacen que diversas películas no lleguen nunca a estrenarse entre nosotros, ni comercialmente ni fuera de esos circuitos.

El cine español, al cual debemos dedicar buena parte de nuestra atención, es el más perjudicado por esta circunstancia, pues las multinacionales lo usan para adquirir licencias de doblaje para títulos americanos, o para cubrir de mala manera la célebre cuota de pantalla en las grandes ciudades. Así, en Villena, por ejemplo, son muy pocas las películas españolas que nos llegan y muchas de ellas, incluso con reconocidos galardones a sus espaldas, quedan inéditas. No pudiendo ser programadas ni siquiera por la Casa de la Cultura. Ejemplos como los que ilustran esta página, «Amo tu cama rica», «Beltenebros»..., son films españoles de multinacional que no se han visto ni se verán en Villena, mientras que «Alas de mariposa» o «Don Juan en los infiernos», al ser distribuidos por casas independientes, sí se han estrenado y con gran éxito en la Casa de la Cultura de Villena.

Desde la revista Villena, hacemos esta reflexión para primero justificar la ausencia de dicho tipo de cine en la programación que se hace a nivel cultural en Villena, y en segundo lugar y sobre todo, para hacer un llamamiento a las partes, para que traten de llegar a acuerdos puntuales, con el fin de conseguir que obras importantes que nos afectan de manera más directa a nosotros y a nuestra cultura, merezcan la atención del aficionado, y conseguir así que ese panorama bastante alentador que hemos conseguido con esfuerzo en el marco de la exhibición cinematográfica local, no contenga ninguna laguna. Todos saldremos ganando.

Extraído de la Revista Villena de 1993