Por la Corredera a la altura del “Cocinero” y delante de la regia Casa de la Cadena, Pedro Palao, con ese ademán que lo caracterizaba, plantado en el centro de la calle ordena a sus escuadristas que inicien la marcha y comienza un vaivén de raso amarillo al compás de un garboso pasodoble que arranca el aplauso allá por donde pasa. El sonriente cabo con orgullo, y como agradecimiento, vuelve la escuadra.
Foto extraída de la Revista Villena de 1971
No hay comentarios:
Publicar un comentario