Análisis constructivo de la Iglesia de Santa María de Villena.
Por REGINO UGEDA NAVARRO, JOSÉ LUIS MORENILLA VICENTE y JOAQUÍN SAN JUAN MARTÍN.
1. MEMORIA HISTÓRICA
La Iglesia de Santa María, debe su nombre al rey de Aragón Jaime I, también llamado «El Conquistador». Éste, reconquista la ciudad de Villena en el año 1240 mandando levantar una iglesia en el mismo lugar donde se encontraba la antigua mezquita. Era costumbre de este rey construir una iglesia en todas las ciudades que reconquistaba, bautizándolas a todas con el mismo nombre.
Un dato que corrobora la antigüedad de Santa María, es el siguiente: el 13 de septiembre de 1340 y bajo el pontificado del papa Clemente VI, los habitantes de Villena tras haber asistido a un jubileo en la citada iglesia fundaron la cofradía llamada «La Asunción de Nuestra Señora» que según documentos de la misma época también era denominada «Santa María del Arrabal» debido a su ubicación.
Sobre esta primera iglesia se construye el actual templo. Su construcción se sitúa entre los siglos XVI y XVII, siendo esta lenta debido a sus numerosas interrupciones por causas económicas.
Según el archivo municipal en el año 1575, durante el reinado de Felipe II, interesándose el monarca por las obras de la iglesia recibe la respuesta de que se está obrando y edificando.
Otra prueba de la lentitud con la que se trabajaba, según las noticias que se conocen, es que la construcción del campanario no comienza hasta el año 1661, viéndose interrumpida tres años después, volviéndose a reanudar las mismas al siguiente año, finalizando la construcción en el año 1668.
El chapitel del campanario terminado en el año 1717, cuesta 6.732 reales y la cruz de hierro que remata la torre tuvo un costo de 1.257 reales. El chapitel es de forma piramidal, recubierto de ladrillos policromados, similar al existente en la iglesia de Santiago.
Del año 1717, datan también las puertas actuales, y las rejas del altar mayor se colocan en el año 1 740, siendo destruidas durante la guerra civil. En este mismo siglo, se construye el coro.
En las bóvedas existían unas pinturas de estilo barroco de autor desconocido que desaparecieron junto con la cubierta en la guerra civil. En el año 1948, se reconstruye la cubierta, la bóveda de la nave central y se pavimenta con mármol el presbiterio y la capilla de la comunión, colocándose dos mesas en el altar mayor también de mármol.
En el año 1896 se rehabilita la cubierta usando como material para la misma madera. Esta madera se consiguió, según el archivo municipal de Villena, gracias a la concesión de un permiso para poder cortar 25 chopos. Dicho permiso fue solicitado por el párroco D. Miguel Lillo al Ayuntamiento del municipio. Las obras se ven de nuevo interrumpidas por falta de recursos económicos.
2. UBICACIÓN Y RELACIÓN CON EL ENTORNO
Comencemos dando unos datos sobre la ciudad de Villena: está situada al noroeste de la provincia de Alicante, siendo la capital del Alto Vinalopó.
Reconquistada por Jaime I, fue cedida al trono de Castilla por el tratado de Almizra (1244). Convertida en marquesado por el rey Enrique II, pasó a la corona aragonesa en 1398 y se convirtió en la causa del litigio que enfrentó a los infantes de Aragón contra Juan II, en el año 1420.
Dentro del municipio de Villena, la iglesia de Santa María se encuentra ubicada en una plaza de estilo medieval a la que da nombre, en el barrio del Rabal.
La situación de la iglesia ha sido determinante para su historia, ya que los cristianos llegados tras la reconquista se asentaron alrededor de Santiago, situada un poco más al oeste que Santa María, dejando a los mudéjares y judíos en el arrabal, lo que dio lugar a que ésta quedase en un segundo plano, surgiendo con ello diferencias a lo largo de la historia.
En la actualidad, la fachada sur se encuentra cubierta por la casa parroquial de construcción reciente junto con una guardería y numerosas viviendas particulares. Adosado a la fachada este se encuentran los locales parroquiales donde se imparte catequesis, quedando vistas tan sólo de esta forma las fachadas oeste o fachada principal y la norte.
Como nota anecdótica y para finalizar contaremos que la iglesia de Santa María presenta la peculiaridad de que en el momento de la Consagración del cuerpo de Cristo el monaguillo toca la campanilla cinco veces en lugar de hacerlo tres como es costumbre. Esta particularidad según dicen las gentes del lugar se debe a que en un momento de la historia de Villena hubo una revuelta popular, marcando la partida el repicar de las campanas por cinco veces.
Los pilares están unidos por arcos, en el sentido longitudinal de la nave los tres primeros pares son de medio punto y de estilo renacentista, movimiento europeo que duró aproximadamente desde el siglo XIV hasta mediados del XVII, de estos los terceros apoyan sobre ménsulas que descargan sobre el tercer pilar, el estilo renacentista se observa también en llumna de estilo clásico adosada al primer pilar. Todos los arcos restantes son ojivales de estilo gótico, estilo arquitectónico comprendido entre los siglos XII y XIV, este estilo se puede observar en esta iglesia en la utilización de bóvedas nervadas de crucería, arcos apuntados y ojivales, pináculos y gárgolas.
La iglesia carece de girola, siendo la cabecera poligonal de cinco lados con contrafuertes exteriores en los vértices, cubierta en su interior por una cúpula nervada sexpartida. La asimetría antes mencionada, se debe a la existencia de una torre con campanario al lado derecho de la fachada principal, el acceso al campanario se resuelve por un primer tramo de peldañeado seguido por una sucesión de rampas formadas por losas de granito, empotradas en los muros perimetrales de sillería que dan forma a la torre y en un núcleo macizo de mampostería situado en el centro de la misma.
La nave lateral derecha da acceso a una serie de capillas de planta cuadrada, destacando una de ellas por estar cubierta con una cúpula hemiesférica sobre pechinas y con linternón, de marcada influencia bizantina como es típico en esta zona.
La cubierta es a dos aguas sobre la nave principal, a distinta altura sobre las naves laterales a un agua y poligonal sobre el ábside.
La fachada principal es totalmente plana y el hueco de acceso recercado por un pórtico barroco del siglo XVIII: el orden del capitel es compuesto.
3. PROCESO CONSTRUCTIVO
El edificio es de nave única y asimétrica. Posee contrafuertes laterales interiores, estos se encuentran perforados dando origen a dos psudonaves de menor altura que la nave principal, permitiendo la circulación lateral. Estas pseudonaves están cubiertas interiormente por una sucesión de diez pequeñas bóvedas de crucería nervadas. Este tipo de bóveda gótica también es empleado para cubrir la nave principal, siendo estas tres y más complejas que las anteriores debido a presentar un mayor tamaño y número de nervios.
Los tres arcos torales de las bóvedas apoyan sobre los pilares, 1, 3 y 5, teniendo éstos semicolumnas adosadas, que son iguales dos a dos pero distintas cada una de ellas a la contigua.
4. DESCRIPCIÓN DEL PROCESO CONSTRUCTIVO
Queremos señalar que debido a la inaccesibilidad de algunas partes del edificio (como pueden ser la cimentación o la cubierta) y a la inexistencia de documentación al respecto debemos suponer cuáles fueron algunas de las técnicas y materiales empleados en función de la época en que fue construida y el lugar donde se encuentra ubicada la iglesia.
Materiales y técnicas empleadas
Cimentación: teniendo en cuenta que la iglesia se encuentra justo en el lugar donde existió una mezquita, caben dos posibilidades; que se aprovechara totalmente o en parte la cimentación de la mencionada mezquita para sentar el nuevo edificio, o bien que se ignorase la antigua cimentación y se construyera una nueva para erigir la iglesia. En cualquier caso la cimentación la suponemos resuelta por zanjas, rellenas de grandes mampuestos de piedra calcárea aglomerados con mortero de cal.
Muros: los muros perimetrales son de sillería irregular con tendeles horizontales de piedra caliza con mortero bastardo entre juntas, la sillería se observa desde el exterior y está revocada interiormente, la anchura de estos muros es de unos 80 centímetros.
El muro de fachada arranca sobre unas primeras hiladas de sillería vista a modo de zócalo hasta una altura de unos 2 metros aproximadamente, este zócalo proporciona una buena base de apoyo al muro de mampostería de piedra caliza que asienta sobre él, esta fábrica está revocada interior y exteriormente y sobre este revoco se marcan tendeles y llagas simulando una sillería.
El muro superior lateral de la nave principal descansa sobre las arcadas longitudinales y es de mampostería revocada interiormente, este tipo de fábrica proporciona ligereza y una cierta elasticidad. Existe una moldura interior (ver sección) que coincide con el cambio de la mampostería del muro superior a la sillería de los tímpanos de los arcos longitudinales de la nave, esta moldura favorece el reparto homogéneo de las cargas.
Los muros perimetrales de las torres son de sillería de piedra caliza mejor escuadrada que la de los muros de la nave y el espesor varía en función de la altura de la torre, siendo mayor en la parte baja y menor arriba, estos cambios de espesor se advierten exteriormente por unas molduras que disimulan el paso de un ancho a otro.
Contrafuertes (y sistemas de absorción de empuje): existen seis contrafuertes que apuntalan a los arcos torales de la nave principal y uno más en cada vértice del ábside poligonal. Al igual que los muros, estos son de sillería caliza y con mortero entre juntas, están rematados superiormente por pináculos y gárgolas.
Las bóvedas colaterales apuntalan los muros laterales de la nave principal hasta la mitad de su altura aproximadamente, sobresaliendo los contrafuertes, en altura, de las naves laterales para contrarrestar los empujes que podrían derrumbar los muros laterales de la nave principal.
Arcadas: tanto los pilares como los arcos y sus tímpanos son de sillería de piedra caliza, las dovelas de los arcos son de tamaños irregulares y están decoradas con arquivolta labrada, la línea de impostas está definida por molduras sobresalientes que aseguran el reparto equitativo de las cargas, es de suponer que para la construcción de estos arcos se utilizarían cimbras de madera.
Bóvedas: como ya hemos mencionado las antiguas bóvedas de la nave principal fueron destruidas en el transcurrir de la guerra civil española, siendo reconstruidas junto con la cubierta en el año 1948, esta reconstrucción se llevó a cabo con los medios y técnicas disponibles en aquella época. Las capillas laterales están cubiertas con bóvedas de cañón.
Cubierta: actualmente está configurada con cerchas metálicas, aunque primitivamente éstas serían de madera, hoy en día la cubierta es de teja plana.
Extraído de la Revista Villena de 1996
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